Las semillas de hierbas aromáticas son cultivadas mediante técnicas de selección avanzada, donde los investigadores realizan múltiples ensayos y pruebas experimentales para identificar las mejores combinaciones de características deseables. Este proceso permite obtener plantas con mayores rendimientos y mayor tolerancia a diferentes condiciones, lo que asegura una producción óptima. Las hierbas aromáticas no solo son valoradas por sus propiedades culinarias, sino también por sus beneficios medicinales, haciendo de estas semillas una excelente opción tanto para huertas caseras como para uso profesional.

En cuanto a las semillas medicinales y de hierbas aromáticas, las variedades sintéticas o de polinización libre fueron las primeras semillas mejoradas por los genetistas. Estas variedades tuvieron un auge significativo con la llegada de la “Revolución Verde”, un movimiento que promovió el uso de semillas mejoradas para aumentar la producción agrícola global. Gracias a estos avances, hoy en día se pueden cultivar una gran variedad de hierbas aromáticas y plantas medicinales con características mejoradas que favorecen tanto la producción como la calidad de las cosechas.